Ingredientes
Para la “leche” de avellanas
- 200g de avellanas tostadas o crudas
- 300g de agua mineral
- 15g de azúcar
Para el “flan” de soja
- 400g de leche de soja
- 1 hoja de gelatina
- 50g de azúcar
- 1 vaina de vainilla
- 1 limón
Elaboración
- Poner las avellanas y la mitad del azúcar en un bol ancho, añadir la mitad del agua mineral bien fría (así evitaremos que el triturado no se pase) y triturar con un túrmix hasta que quede como una pasta. Taparlo con film y dejar reposar en la nevera ocho horas o toda una noche para hidratarlo.
- Sacar el puré de avellanas de la nevera y con una cuchara pasarlo por la licuadora para sacarle el zumo.
- Repetir el proceso dos veces volviendo a pasar al pulpa que nos queda en el recipiente. Cuando ya tenemos la “leche”, la reservamos en la nevera.
- Poner la hoja de gelatina en remojo con agua fría para que se hidrate. Coger la vaina de vainilla y abrirla por la mitad, con la ayuda de un cuchillo quitar la pulpa de su interior. Añadir la leche de soja. Removerlo todo con un batidor.
- En un cazo poner la leche de soja con la vainilla disuelta y el azúcar, escurrir bien la hoja de gelatina y ponerla dentro. Calentar hasta disolverse y remover con un batidor. Ponerlo en moldes o recipientes tipo flan y dejarlo cuajar durante 4 horas como mínimo en la nevera.
- Quitar el “flan” de soja de la nevera y desmoldarlo con un cuchillo o cuchara, ponerlo en el centro de un plato. Rallar la piel del limón por encima. Servirlo con un chorrito de la “leche” de avellana tostada bien fría.
Nota
Se puede hacer la “leche” de cualquier fruto seco o mezcla de varios. La cantidad de azúcar es aproximada, según el gusto de cada uno. Si no se le pone azúcar, se puede servir como aliño o salsa para verdura o pescado. Se puede sustituir el batido de soja por la “leche” de frutos secos para hacer el flan, siguiendo el mismo proceso.
Los frutos secos a parte de ser muy calóricos y nutritivos, aportan gran cantidad de calcio, imprescindible cuando el consumo de lácteos se ve disminuido. También es una buena opción para cuando aparece la pérdida de apetito. Y por su textura blanda, suave y refrescante es también un plato interesante para las personas con inflamación de mucosas y/o sequedad de boca y dificultad para tragar.