Las pseudoterapias

Los tratamientos oncológicos evolucionan constantemente, lo que obliga a realizar una investigación permanente que aporte una evidencia científica sólida acerca de su eficacia y seguridad. Sin embargo, a pesar de los avances, la ciencia y la investigación no siempre tienen respuestas y soluciones para luchar de forma efectiva frente a todos los tumores. Esta realidad abre la puerta a la aparición de prácticas como las pseudoterapias que pueden representar un peligro para la salud física y emocional de los pacientes oncológicos y sus familiares

pseudoterapias y cáncer

 

¿Qué son las pseudoterapias?

Las pseudociencias y las pseudoterapias constituyen un conjunto de prácticas o conocimientos cuya eficacia y seguridad no han sido demostradas científicamente para tratar la dolencia para la que se ofertan, o bien porque resultan imposibles de replicar. Estas pseudoterapias promueven la idea de la curación, prevención o mejoría de la sintomatología a través de distintos procedimientos basados en resultados aislados o, imprecisos no respaldados por estudios realizados según el método científico, por lo que no cuentan con ningún aval o evidencia científica ni están aprobados por las autoridades sanitarias reguladoras.

En ocasiones, estas pseudociencias o pseudoterapias sí cuentan con estudios de apariencia científica, pero que no están realizados con una metodología adecuada, o sus resultados también pueden ser explicados por el efecto placebo o por el transcurso natural de la enfermedad.

Debido a su a una situación de extrema vulnerabilidad e incertidumbre, el paciente oncológico es especialmente sensible a aferrarse a prácticas como las pseudoterapiaspara encontrar una curación o mejora de su estado de salud de forma rápida.

Aunque el riesgo de caer en el uso de las pseudoterapias es elevado en todas las etapas de la enfermedad oncológica, existen algunos periodos en los que este peligro se acentúa. Es el caso de los pacientes con enfermedad avanzada y sus familiares, que se encuentran en una situación desesperada en la que manifiestan una necesidad más acuciante  de frenar el avance de la enfermedad. Del mismo modo, los pacientes con cáncer que presentan con problemas de soledad o tienen escaso apoyo social pueden ser especialmente influenciables por los falsos atractivos de las pseudoterapias.

Por estos motivos, es imprescindible no estigmatizar ni culpabilizar al paciente sino entender la extrema vulnerabilidad emocional en la que éste se encuentra en ese momento y ayudarle a que no haga uso de este tipo de pseudoterapias porque pueden poner en riesgo tanto su salud física como psicológica.

Riesgos de las pseudoterapias

La peligrosidad de estas prácticas reside, principalmente, en abandonar los tratamientos comprobados científicamente, o en utilizarlos de manera complementaria, algo que podría ser incompatible con los tratamientos oncológicos prescritos por el médico especialista. Además, existen algunas pseudoterapias que son peligrosas por sí mismas debido a los efectos negativos que pueden producir tanto a nivel físico como psicológico (empeoramiento de la enfermedad y la calidad de vida del paciente, daño emocional derivado del incumplimiento de la promesa de curación y la sensación de engaño etc ).

Ante esta situación, la recomendación más importante para los pacientes es que en ningún caso se abandone el tratamiento prescrito por el médico especialista y, en caso de querer utilizar alguna de estas pseudoterapias, consulten y confíen en los profesionales sanitarios y psicológicos para recibir una opinión experta, contrastada y de calidad. Puesto que las pseudoterapias se aprovechan principalmente de las debilidades del sistema sanitario y de la desinformación del paciente es necesario igualmente combatir tanto su popularidad como su difusión a través de páginas web y redes sociales, ya que suelen operan en ámbitos donde el mensaje científico no llega de forma clara y donde pueden manipular de forma más sencilla las emociones del gran público. 

Para ello es necesario proporcionar al paciente y sus familiares fuentes de información fiable a las que recurrir para resolver las dudas que se le presenten a lo largo del proceso oncológico, así como promoverla divulgación de información contrastada sobre sus peligros para la salud de los pacientes de cáncer.

La Asociación Española Contra el Cáncer no promueve, recomienda ni avala este tipo de metodologías porque fomentan la idea de la curación, prevención o mejora de la salud sin contar con aval científico. La Asociación se basa en la promoción de la investigación científica de calidad como principal vía para aumentar la supervivencia en cáncer durante los próximos años, así como en la defensa del derecho de los pacientes y familiares a recibir una atención multidisciplinar y profesional basada siempre en la evidencia científica.

Para una información más detallada acerca de las pseudoterapias más conocidas y/o relevantes, recomendamos la consulta de la web que posee el Observatorio contra las Pseudociencias, Pseudoterapias, Intrusismo y Sectas Sanitarias del Consejo General de Médicos.

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