¿Qué es el cáncer de huesos?

El cáncer óseo u osteosarcoma es el tumor maligno que se origina en los huesos. Los tumores malignos se caracterizan por tener un crecimiento descontrolado y extenderse a otros tejidos. Están formados por células que han acumulado alteraciones en su material genético, que les permiten evadir el control del ciclo de división celular, evitar ser reconocidas y eliminadas por el sistema inmune y crecer de forma descontrolada e infiltrar los tejidos de alrededor. De esta forma, estas células pueden también viajar a través de la sangre o la linfa a otros órganos y crecer formando nuevas lesiones (metástasis).

El esqueleto humano o sistema esquelético es el conjunto de los huesos de nuestro organismo. Hay aproximadamente 206 huesos. Están constituidos por el tejido óseo, que es el tejido de sostén de todo nuestro organismo y el que le proporciona una estructura funcional firme.

El hueso está formado por tejido vivo. De hecho, se está remodelando continuamente mediante unas células llamadas osteoblastos (responsables de la creación de hueso) y de los osteoclastos (responsables de su destrucción). Los osteocitos son otras células del hueso. Hay otras células y tejidos en las articulaciones, así como en los vasos sanguíneos que nutren el hueso y nervios.

Tiene varias funciones:

  • Función “mecánica”: Es decir, dar soporte al resto de estructuras de nuestro organismo, proteger a los distintos órganos, intervenir en el movimiento. 
  • Función “metabólica”: Colaborar en el metabolismo del calcio y el fósforo.
  • Función hematopoyética: En la médula ósea, que se encuentra en el interior de los huesos (sobre todo largos), se producen los elementos formes o células de la sangre (glóbulos rojos, blancos y plaquetas).

Tipos de cáncer óseo

La clasificación de los tumores malignos primarios del hueso incluye los siguientes tipos, según las diversas células que los originan:

  • Osteosarcoma
  • Condrosarcoma
  • Sarcoma de Ewing
  • Angiosarcoma
  • Fibrosarcoma
  • Cordoma
  • Adamantimoma
  • Otros sarcomas.

No se consideran como tumores óseos ni se explicarán en este apartado, los tumores derivados de las células de la sangre (linfomas, mieloma), aunque afecten a la médula ósea.

Por otra parte, las metástasis en el hueso de cánceres de otro origen (mama, próstata, etc.) son las que se conocen como tumores óseos secundarios (al cáncer que los origina). Y sus características, tratamientos y comportamiento son diferentes.

El cáncer de hueso en cifras

Según la Organización Mundial de la Salud, la incidencia de los tumores óseos es de 1,2/100.000 habitantes/año para el sexo masculino y 0,9 para el femenino según el National Cancer Institute.

En España, según datos del INE, en el año 2022, hubo 356 muertes (197 hombres y 159 mujeres) por tumores óseos. Es la quinta causa de cáncer en niños y adolescentes.

Algo más de la mitad de los sarcomas óseos son osteosarcomas, una tercera parte sarcomas de Ewing y menos del 10% condrosarcomas.

En cuanto a la edad de presentación, el sarcoma de Ewing es muy poco frecuente en adultos. Sin embargo, el osteosarcoma tiene una distribución por edades de tipo bimodal, esto es, con dos picos de mayor incidencia entre los 13 a 16 años y en mayores de los 65 años.

La supervivencia global de los osteosarcomas es de un 68,2 % a los 5 años en el periodo 2014-2020.

 

Actualización de los datos epidemiológicos en octubre de 2024.