Recuerda a la persona que ha muerto. Recordar a la persona que ha muerto es bueno. A veces los mayores evitan hacerlo porque es difícil para todos y porque creen que de esta forma no te harán sufrir. Sabes que aunque la persona que has perdido no pueda estar contigo, siempre te quedarán sus recuerdos. Habla de ella, di su nombre, mira fotos y recuerda los momentos divertidos que pasasteis juntos. Una idea para sentirte mejor. ¿Por qué no haces un álbum de fotos? Busca fotos junto a la persona que ha fallecido y monta un álbum con ellas. Siempre que eches de menos a esa persona míralo y recuerda todos esos momentos que habéis vivido juntos.