Un estudio ayuda a predecir los resultados adversos de la inmunoterapia
El oncólogo Hugo Arasanz junto con el Dr. David Escors, investigadores del centro Navarrabiomed que cuentan con la ayuda de la Asociación Española Contra el Cáncer, han encontrado un posible método para predecir los resultados adversos de la inmunoterapia anti-PD1/PD-L1 en pacientes de cáncer de pulmón de células no pequeñas.
La inmunoterapia anti-PD1/PD-L1 es un tratamiento basado en conseguir que las células inmunitarias reconozcan a las células del tumor y las destruya. Es un tratamiento que ha resultado ser beneficioso para algunos pacientes de cáncer, pero también existe un riesgo de enfermedad hiperprogresiva, una consecuencia por la que el tumor crece de forma acelerada y genera un deterioro del paciente. El problema actual es que no se conocen métodos que permitan predecir la enfermedad hiperprogresiva con suficiente antelación que ayuden a evitar riesgos en los pacientes. Sin embargo, los investigadores de este equipo han encontrado una posible solución para esto, al fijarse en el número de linfocitos T-CD4 o ‘’colaboradores’’ que hay en la sangre, unas células del sistema inmunitario que ayudan a dirigir las defensas de nuestro organismo para que puedan funcionar bien.
Se analizaron muestras de 70 pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas metastásico antes y después del tratamiento de inmunoterapia anti-PD1/PD-L1, y observaron que los pacientes que sufren enfermedad hiperprogresiva tras la inmunoterapia presentan unos niveles en sangre más elevados de un tipo de estos linfocitos colaboradores que aquellos que no los padecen.
Estos resultados, por tanto, muestran que cuantificar y conocer el número de estas células en los pacientes tras el primer ciclo del tratamiento permite detectar a tiempo a las personas que tienen más riesgo de enfermedad hiperprogresiva y prevenirla. Un avance que puede ayudar a mejorar el manejo de los pacientes en la clínica.
La investigación, liderada por Hugo Arasanz, se ha desarrollado en estrecha colaboración con Miren Zuazo, investigadora predoctoral del mismo equipo en Navarrabiomed y principal responsable del proyecto en el que se enmarca el artículo.
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12/02/2020