La Unidad de Ejercicio Físico Oncológico (UEFO) de la Asociación Española Contra el Cáncer en Madrid ha organizado el primer viernes de octubre, una jornada matinal teórico-práctica, con la asistencia de un centenar y medio de pacientes, con motivo del 5º aniversario de su puesta en marcha en 2018.

Tras unas palabras de bienvenida a los usuarios y usuarias y de agradecimiento a los técnicos deportivos de la responsable del Departamento de Programas y Servicios, Ana González, de quien depende la Unidad de Ejercicio Físico, la doctora Lucía Gil Herrero, que dirige este servicio, y Ángel Carrasco, técnico del mismo, realizaron un recorrido de la UEFO desde sus orígenes, hablando de la importancia que posee el ejercicio físico y la nutrición como hábitos de vida saludables. Este segundo aspecto lo trató Raquel García, graduada en Nutrición Humana y Dietética y facilitadora de la Asociación, a través de una videollamada en directo, demostrando que el ejercicio y la nutrición forman un “binomio perfecto”.

Con el afán de dar este novedoso servicio, se formó la Unidad sustentada con profesionales especializados y pacientes concienciados en este nuevo campo. Pronto, comenzaron a divulgarse resultados, a través de evidencias científicas, y los beneficios encontrados en los usuarios que participaban en el programa, uno de los pioneros en España.

Durante estos cinco años, más de 1.400 pacientes oncológicos han realizado el programa de ejercicio y medio millar ha participado en talleres y charlas, de temas relacionado con la fuerza, el ejercicio cardiovascular o la supervivencia, atendiendo más de 25 tipos de tumores diferentes, en cualquier estadio de la enfermedad, como apuntó Gil Herrero. 

Durante la pandemia se adaptó el programa presencial a la modalidad online, servicio que se ha instaurado en la actualidad, ya que gracias a ese programa remoto se puede llegar a personas que viven lejos o que tienen dificultades para desplazarse hasta la Unidad, ubicada en la Sede de la Asociación en Madrid.

El principal objetivo es realizar programas específicos que permitan reducir los efectos secundarios en los pacientes

Tanto Gil Herrero como Carrasco aseguraron que la inactividad física y el sedentarismo se han convertido en una epidemia de grandes dimensiones en la sociedad, por su alto impacto negativo en la salud del ser humano. Estos niveles de inactividad se ven acrecentados en pacientes oncológicos, tanto en fase de tratamiento como postratamiento, encontrando que menos de la mitad de los pacientes se mantienen activos tras este proceso. Por ello, el principal objetivo es realizar programas específicos que permitan reducir los efectos secundarios  en los pacientes, mejorando su salud y así, una mejor calidad de vida.

A su vez, estudios previos, han demostrado que el ejercicio físico mejora la condición física de las personas con cáncer, reduce la fatiga muscular, potencia el sistema inmune y en definitiva mejora su calidad de vida. Además, el ejercicio se ha relacionado en este tipo de pacientes con una mayor supervivencia y mejor pronóstico de la enfermedad, especialmente en cáncer de mama, colon y pulmón. 

Tras las presentaciones se llevó a cabo un desayuno saludable al aire libre y, posteriormente, un entrenamiento suave y didáctico en el parque de Francos Rodríguez, situado a menos de cien metros de la Sede de Madrid. Los asistentes, en su mayoría mujeres (11% hombres y subiendo), recibieron una pulsera conmemorativa como recuerdo del aniversario.