El Ayuntamiento de Girona y la Asociación Contra el Cáncer a Girona han empezado a marcar los entornos de los centros cívicos de la ciudad como espacios libres de humo. El pasado viernes se descubrió la placa “entorno sin humo” que se ha instalado al exterior del Centro Cívico Pla de Palau y la Biblioteca Ernest Lluch para que la gente no fume alrededor de esta equipación. Una placa que también se colocará en los centros cívicos Onyar, Barri Vell-Mercadal, Santa Eugènia y Pont Mayor.

El acto contó con la participación de la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas; la regidora de Salud del Ayuntamiento de Girona, Eva Palau, y la secretaria del Consejo Provincial de la Asociación Contra el Cáncer a Girona, Julieta de Masdevall. 

La decisión se ha tomado a raíz de una consulta popular que se puso en marcha el pasado mas de noviembre en la página web del Ayuntamiento. Un total de 847 personas respondieron la encuesta, a través de la cual se recogieron 911 respuestas. De estas, 284 especificaron que se tenían que convertir en espacios sin humo los entornos de los centros cívicos o espacios donde se realicen actividades colectivas; 261, el en torno a espacios deportivos como pabellones y campos de fútbol municipales; 246, las zonas ajardinadas, y 120, otros puntos como terrazas de bares y restaurantes, parques infantiles o paradas de autobús. 

El objetivo de esta campaña es concienciar la población sobre la importancia de evitar el humo del tabaco en zonas de convivencia común para favorecer la preservación de la salud. La intención es remover conciencias a favor de llevar una vida saludable y de poner el freno al impacto del tabaco, sobre todo por los menores. El siguiente paso será trabajar con el objetivo que los entornos de los centros deportivos municipales se conviertan también en espacios libres de humo. 

La Asociación Contra el Cáncer puso en marcha esta campaña en ámbito nacional el pasado mas de mayo, coincidiendo con el Día Mundial Sin Tabaco que tiene lugar cada 31 de mayo. La acción forma parte de una propuesta el objetivo final de la cual es impulsar la ampliación de la actual Ley antitabaco y lograr que el 2030, en la línea con la Unión Europea, se consiga la primera generación libre del humo del tabaco.

Según la asociación, cada año en el mundo mueren más de 8 millones de personas a causa del tabaco, de las cuales 7 millones lo han hecho por consumo directo y alrededor de 1,5 millones nunca habían encendido un pitillo. El humo del tabaco contiene más de 70 sustancias cancerígenas y perjudica las personas que están expuestas, especialmente los y las menores de doce años, que son una población muy vulnerable y está indefensa frente al humo del tabaco. El 72% de los menores están expuestos al humo del tabaco y el 43% inhalan más de 70 sustancias cancerígenas, el que multiplica el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón durante la edad adulta.