La humanización del cuidado al paciente fue tema principal del III Congreso Gallego de Personas con Cáncer y Familiares de la Asociación Española Contra el Cáncer, al que asistieron unas 500 personas. Ourense fue la ciudad elegida como escenario para este evento autonómico que se celebra cada dos años y que, en esta ocasión, se centró en resaltar la importancia de los tratamientos y el trato a los pacientes oncológicos y sus familiares a través de charlas y talleres con expertos y profesionales de la materia. También sirvieron de oportunidad para fomentar la unidad entre las Juntas Locales de la Asociación, que participaron en estas dos jornadas celebradas el 8 y 9 de noviembre.

La conferencia inaugural contó con el doctor Ángel Carracedo, director de la Fundación Galega de Medicina Xenómica y miembro de la Real Academia Gallega de Ciencias, que habló sobre la adaptación de los tratamientos de cáncer a cada paciente gracias a los avances en genética y biotecnología. Después tuvo lugar una mesa redonda dedicada a la humanización en los cuidados, en la que participaron médicos y pacientes para aportar su punto de vista sobre la materia. La primera jornada acabó con la historia como mujer diagnosticada de cáncer de Loida Zabala, campeona de Europa de halterofilia.

En la jornada del 9 de noviembre se continuó con dos mesas redondas. La primera fue la de investigación, que resaltó el objetivo marcado por la Asociación de superar el 70 % de supervivencia en cáncer para el año 2030, y en la que participaron expertos como Rosario García Campelo, jefa del Servicio de Oncología Médica del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, o Angélica Figueroa, líder del grupo de Plasticidad Epitelial y Metástasis del Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña.

La segunda mesa redonda estuvo centrada en los cuidados en la casa, que contó como moderadora con Lourdes Silvoso, coordinadora provincial de Atención al Paciente y Usuario de la Asociación: “se intentó recoger todo lo que supone cuidar a un paciente desde el domicilio. Se habló de la importancia de la coordinación entre profesionales de la salud y los familiares, las necesidades de entrenamiento y formación, el autocuidado del paciente y cuidadores —que es un aspecto fundamental— y la adaptación del hogar con equipamiento necesario”. Estas conversaciones sirvieron para evidenciar una labor ardua cuya recompensa es “la satisfacción del paciente y del cuidador al poder estar en su propio hogar recibiendo los cuidados necesarios”, comenta la representante provincial.

Los talleres tuvieron un lugar destacado, sobre todo el de Cuidarse con ejercicio, impartido por Inés López, fisioterapeuta de nuestra Junta Provincial. Esta sesión sirvió para orientar a los participantes sobre las actividades físicas que los pacientes pueden realizar en su casa y para quitarles el miedo a las mismas, lo que les permite aprovechar sus beneficios terapéuticos.  “El ejercicio actúa como método preventivo para la población en general. Hay determinados tipos de cáncer, como el de mama postmenopáusico o el de pulmón, en los que la evidencia científica establece una estrecha relación con la inactividad y el aumento de peso. En el caso de quienes han recibido un diagnóstico, el ejercicio reduce los efectos secundarios del tratamiento, especialmente en el caso de la quimioterapia”, cuenta Inés Lopez.

Entre los organizadores del evento se encontró Maika Barreiro, trabajadora social de la Asociación: “hemos querido destacar la importancia de los cuidados en el paciente oncológico y el papel de los cuidadores. También nos interesó mostrar las carencias que pueden encontrar y los recursos que existen a través de las diferentes dinámicas”. Además, resaltó su intención de fomentar la unidad y la cooperación entre las Juntas Locales. “Quisimos llegar a todo el territorio y a muchas personas de núcleos rurales que no tienen tan fácil el acceso a los recursos. En este tipo de jornadas, compartimos las mismas actividades dentro de un Congreso que fue muy conmovedor por los vídeos que se mostraron. La gente se emocionó mucho”.

Durante el congreso “lloramos, reímos y nos concienciamos de que hay que hacer mucho más de lo que se está haciendo”, asegura Carmen Facal, presidenta de la Junta Local de Coristanco. Además, las charlas abordaron temas de interés que deberían “ser conocidos por muchísima más gente para ver todo lo que se hace y lo que se podrá hacer en el futuro”.

Por su parte, la presidenta de la Junta Local de Muxía, Rosa Valiña, señala que ella “tiene mucho interés por ayudar a los pacientes. Las conferencias nos sirvieron para tomar algún consejo. En todas aprendimos muchísimo”. También asegura que las charlas le fueron de utilidad porque “hay familias que no quieren hablar del cáncer y tienes que buscar el camino para poder ayudarles”.

Rocío García de la Barga, responsable de Coordinación Territorial de la Junta Provincial de A Coruña de la Asociación, incidió en la unidad entre las Juntas al hablar del evento celebrado en Ourense y el destacado papel de los voluntarios. “Los congresos son una actividad única para la participación de las Juntas Locales. Sus agrupaciones de voluntarios organizan numerosas actividades en sus municipios, pero el tener la oportunidad de unirse a otros de diferentes localidades y provincias, ver de primera mano a pacientes a los que ayudan a ayudar, contactar con los profesionales de la entidad y aprovechar el espacio de encuentro que se genera es un elemento muy motivador para ellos, que trabajan de manera incansable sin esperar nada a cambio. Estos espacios compartidos son un reconocimiento implícito a toda esa solidaridad”.